En la última medición del Monitor del Clima Social también realizamos preguntas en relación a los espacios verdes y a la gestión de los residuos. Las restricciones por la pandemia cambiaron la relación de los ciudadanos con su barrio y los espacios verdes, como también con la gestión de los residuos.
En materia de espacios verdes más de la mitad de los encuestados en el AMBA afirman que necesitan contar con más espacios verdes en las cercanías. Especialmente los más jóvenes que fueron quienes más visitaron plazas y parques (40%).
En relación a los datos sobre residuos sólidos urbanos (RSU), en el AMBA un 36% manifestó separar los residuos frente a un 37% que no separó. Un desafío aún pendiente para los gobiernos locales. Los que separan los residuos, un 43% los lleva a circuitos formales de separación y reciclado, mientras que un 25% se los da a los recuperadores urbanos informales.
Esta opción también se mantiene presente en los datos de la Ciudad Buenos Aires, el 18% de las respuestas apuntan a los recuperadores urbanos para disponer los materiales a recuperar. A pesar de que CABA cuenta con una Ley que establece circuitos formales para la separación y recolección diferenciada de los residuos, gran parte de este proceso se sostiene gracias a la labor cotidiana de estos trabajadores.
“En muchas ciudades del mundo la tendencia apunta a la implementación de políticas bajo el principio conocido como Responsabilidad Extendida del Productor (REP), donde quienes fabrican y comercializan los productos se responsabilizan por su gestión y reciclado. En este sentido es alentadora la respuesta ante la consulta de “si considera que quienes fabrican y comercializan productos deberían hacerse cargo de su gestión final cuando éstos se convierten en residuos, reciclando o recuperando los materiales” un contundente 63% en todo el AMBA respondió afirmativamente, coincidiendo tanto los sectores más instruidos como los menos, sin diferencia de edades”, remarca Pablo Mesa, coordinador académico y del área Territorio y Acceso a Derechos del CEM.
Por su parte, Matías Barroetaveña, director del CEM, agrega: “El monitor ambiental nos muestra la demanda de la sociedad, especialmente de las y los jóvenes, por contar con más espacios verdes públicos y de un mayor compromiso ambiental de las empresas a la hora de responsabilizarse de los envases que generan”.